
El uso de tuberías de polietileno reticulado (PEX) ha revolucionado la instalación de sistemas hidráulicos en las construcciones modernas. Este material, además de ser flexible y resistente a la corrosión, permite reducir los tiempos de instalación y minimizar los costos de mantenimiento. Asimismo, la integración de válvulas inteligentes y sensores de detección de fugas ha mejorado la eficiencia y el control del consumo de agua en los edificios.